En la celebración de la fiesta de la Santísima Trinidad, el diácono Rafael Díaz de la Zona del Maipo ofreció un conmovedor comentario dominical, invitando a la comunidad a seguir el mandato del Evangelio de Mateo de llevar el mensaje de Cristo a todo el mundo.

*"El Señor invitó a sus discípulos al monte de Galilea para una última palabra para ellos",* comenzó Díaz, recordando las palabras de Jesús resucitado a sus seguidores. "Al verlo, algunos todavía dudaron. Quizás esa es nuestra debilidad y nuestra fragilidad, que existe la duda o que existe algún pensamiento que todavía no comprende la dimensión del resucitado".

En su mensaje, Rafael subrayó la importancia de superar esas dudas y aceptar la misión encomendada por Jesús: *"Vayan pues y anuncien a todo el mundo la buena nueva y bautícenlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo"*. Para el diácono, esta tarea es tanto un privilegio como una responsabilidad que la comunidad cristiana debe asumir con entusiasmo y dedicación.

"Tengamos pues el gozo de la tarea que tiene la misión desde siempre y para siempre: anunciarlo y al anunciarlo, ser capaces de bautizarlos y hacerlo en el nombre de la Santísima Trinidad",* exhortó Díaz. *"Grande es la tarea, hermosa la misión. Por eso, emprendamos este caminar con gozo y alegría".*

El diácono destacó que, en este camino, los fieles no estarán solos. Jesús prometió estar con ellos en todo momento, especialmente en los tiempos difíciles. "Saber que nos acompañará él siempre, en todo momento, en todo día, cuando estemos tristes o agotados, cansados o agobiados; él estará ahí a nuestro lado para sostenerlo, para animarlo y para ser testigo de él",* concluyó.

Este llamado a la acción, impregnado de esperanza y fe, busca revitalizar a la comunidad y fortalecer su compromiso de difundir el mensaje del Evangelio, continuando la misión iniciada por los discípulos en Galilea.