“Fue un compartir fraterno, acompañado siempre de Dios y María, que nos guió a un encuentro junto con los demás catequistas. Fue muy bonito, un rico desayuno de mano de las hermanas y jóvenes, nos invitó a la Eucaristía, un encuentro con Jesucristo que, de la mano del padre vicario, nos animaba a seguir guiando a niños, niñas, jóvenes, adultos y ancianos en la evangelización del Reino de Dios y al amor de hermanos. Luego tuvimos un encuentro de dinámicas con Ludens et Ridens/Jugando y Riendo, donde nos enseñaron que incluso un encuentro lúdico bien planificado nos ayuda a pasar un tema de manera más interactiva y catequística. En resumen, un encuentro muy bonito y fraterno junto a nuestros hermanos de la zona”, expresó Francisco Martínez, catequista de la parroquia San Columbano, quien participó en la celebración zonal del Día del Catequista, realizada durante el mes de mayo en la Vicaría Zona Sur.

En un ambiente de fe y fraternidad se desarrollaron las diversas actividades organizadas para los catequistas que caminan en la Zona Sur de Santiago. La encargada de catequesis zonal, Hna. Gabriela Guadalupe Flores HCJC, nos compartió fotos y experiencias de lo vivido: “Los catequistas vivieron un semestre lleno de actividades que reforzaron su compromiso y amor por la evangelización. A través de encuentros formativos y momentos de reflexión, se fortalecieron en su misión de llevar la palabra de Dios a todos los rincones”, indicó.

Ruth Cáceres, catequista de San Columbano, también compartió su experiencia positiva: “El encuentro en la vicaría fue muy grato y sorpresivo. Nunca me había atrevido a ir porque los sábados son para disfrutar de lo que Dios me permite hacer dándome vida y salud en los scouts. Esta vez me sentí motivada, fui y lo disfruté al máximo. El desayuno exquisito al llegar se sentía en ese ambiente de acogida y cariño, las dinámicas fueron un momento para sociabilizar con mis pares”.

La formación espiritual y la convivencia también fueron resaltadas por Marylin Valenzuela, quien comentó: “Me encantó la experiencia desde el primer momento. Al llegar, los coordinadores de la actividad nos recibieron con un delicioso desayuno, haciéndonos sentir muy acogidos. La Eucaristía fue excelente: sencilla, con un mensaje claro y motivador. Además, la actividad final fue extraordinaria; considero maravilloso aprender jugando y, sobre todo, romper con la rutina semanal”.

Valentina Henríquez coincidió en destacar la acogida y la calidad del encuentro: “Para mí fue una bonita experiencia. Llegamos desde temprano y fue agradable que nos recibieran con un desayuno muy variado, había para todos los gustos. La Eucaristía también estuvo muy bonita y el mensaje del vicario estuvo acorde a los tiempos que vivimos. Para finalizar, el que nos hayan hecho jugar y aprender formas de entregar el mensaje de Dios de manera lúdica también se agradece”.

Este semestre ha sido testimonio de la dedicación y el amor con el que los catequistas de la zona sur de Santiago llevan a cabo su misión. Las actividades organizadas no solo han servido para la formación continua, sino también para fortalecer la comunidad y recordar el valor de la evangelización en la vida cotidiana.